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Tres Hermanos

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Tres Hermanos

Descripción:   Salida deportiva de septiembre

Objetivo:        Cumbre central (4595) cerro tres hermanos.

Fecha:             17-19 de septiembre de 2016

Encargado:    Bernardita Araya

Relator:          Ignacio Carrasco (Chefo)

Cordadas:

  • Diana Cid, Gabriela Anríquez, Stephano Novani, Sebastián Orellana
  • Alendro Sánchez, Daniel Acosta
  • Ignacio Villagra, Martina Monckeberg
  • Dager Borvarán, Bernardita Araya, Nicolás Villar
  • Diego Rodríguez, Paula Urizar
  • Carlos Fuentes, Ignacio Carrasco
  • Kevin Lee, Orlando Solis
  • Ariel Alvéstegui, Arturo Alvéstegui
  • Tamara Rivera, Gabino Reginato
  • Christian Ponce, Catalina Castro, Maximiliano Díaz
  • Andrés Retamal, Hans Nordheimer

Sábado 17 de septiembre.

De Santiago al centro de ski Portillo

26 ramucheros montados en una cantidad que no recuerdo de automóviles y un bus subsidiado por la rama, salen del parque Bustamente a las 9:00 am aproximadamente. Retrasados de nuestra hora planificada de partida, íbamos camino hacia el centro de ski Portillo, donde iniciaríamos la aproximación. En el bus repasamos algunos nudos y tuvimos un debate de alto nivel sobre la Organismos Genéticamente Modificados (OGM). Un par de curvas más y el biotecnólogo del grupo consigue modificarnos el cerebro.

Ya a 2800 metros de altura nos reagrupamos en el estacionamiento del hotel, las cordadas organizan el contenido de las mochilas y damos inicio a la aproximación, no sin antes sacarnos una foto con los Tres Hermanos y la laguna de telón de fondo. Una persona que trabaja en centro de ski nos indica el inicio del camino, que luego de la primera hora nos dimos cuenta no era el más adecuado.

Inicio de la marcha – Aproximación

La abundante nieve de la ladera hace que el inicio sea lento, dándonos cuenta que hubiese sido mejor caminar por la orilla de la laguna. La vista es increíble, rodeados de cerros, nieve por todos lados y una laguna de un azul intenso, que parecería una locura zambullirse en ella. Luego de alrededor de una hora de caminata por la ladera del cerro, vemos que la única manera de seguir de manera segura es subir un poco más y bordear un macizo. Aquí, dado que el sendero se vuelve expuesto, los más avezados instalan un pasamano con tal de disminuir el riesgo de caída.

Luego de un segundo paso, con menos nieve, pero bastante expuesto también, nos reunimos todo el grupo a comer algo e hidratarnos. El fin de la laguna se ve más cerca y luego de disfrutar el sol echados en las rocas reemprendemos la marcha. Esta vez vamos por la orilla de la laguna, intentando no patear tanto las piedras. El grupo va bastante unido, con tres bloques bastante distinguibles que se vuelven a reagrupar cuando dejamos la laguna. Ya son aproximadamente las 16:00 y nos queda bastante hasta el CB planificado.

Cada vez que me volteo, me doy cuenta que no nos podremos deshacer del hotel del centro de ski por un buen rato. Me pregunto si tendrán algún bote para cruzar rápido este charco helado. La laguna continúa alejándose y así también lo hace la carretera, la señal de celular, las preocupaciones cotidianas y la vida de montaña adquiere más fuerza. El sol nos sigue acompañando por un rato, pero todos sabemos que apenas pase detrás del cerro comenzará el viento y el frío.

Entre armar la carpa, derretir nieve y comer se nos irá un buen rato, por lo que vemos que pronto tendremos que instalar el campamento. Tenemos el dilema entre seguir caminando con peso para adelantar camino para el siguiente día, versus armar campamento un poco antes y guardar energías. Finalmente se opta por lo segundo, ya que la hora es avanzada y la marcha es lenta.

Escogemos un lugar donde no hayan rodados visibles o riesgo de avalancha para instalar el CB. Terminamos cuando el sol solo se divisa en lontananza. Aplanar los sitios y construir pequeños muros de contención del viento nos toman un rato. Berni nos convoca para decirnos que el objetivo de la salida se cambia a la cumbre sur en lugar de la central, ya que es más viable que lo consigamos. Nos pasó la cuenta la aproximación más lenta de lo esperado y la instalación del CB más abajo.

El plan es salir a las 4:00 am en punto a atacar cumbre. Crampones ajustados, nieve derretida y organización de mochila antes de dormir. Con mi cordada comemos unos deliciosos tortellini, que terminamos con esfuerzo pero pensando en la energía que nos darán en unas horas. Conversamos un poco y me cuenta que está de cumpleaños. Feliz cumple compa!

Sábado 18 de septiembre

Ataque de cumbre

Tiquititi, tiquititi…la alarma suena a las 3:00 am y nos preparamos pa la segunda patita. Comemos unos panqueques muy similares a los que come 11 en Stranger Things, lo que me da un buen presentimiento. Sin hambre, me obligo a terminarlos, necesito superpoderes para lo que se viene. La noche no es tan noche porque la luna brilla brilla y casi no necesitamos nuestras linternas. Iniciamos marcha a las 4:15. La nieve está dura, pero con los crampones se agradece.

Nos espera una buena caminata en una pendiente leve hasta cuando luego de un poco más de una hora giramos hacia nuestra derecha. Aquí agradezco haber subido y bajado tantas gradas en el Nacional, porque se vienen muchos escalones imaginarios. Subimos, subimos, y seguimos subiendo. Me voy encontrando con distintos compañerxs, con quienes conversamos un poco, compartimos ración de marcha o nos sacamos el agua de las mochilas. Se mantienen los tres bloques dentro del grupo. Paula y Diego van abriendo, Dager y Gabino acompañan al segundo grupo; Berni, Tamara y Nico cierran.

La pendiente aumenta un poco más y cruzamos un mar de penitentes, como escalones más grandes. Siento la altura y tengo que ir parando más seguido. A lo lejos, veo cómo 4 personas se están devolviendo al CB y me pregunto si todo está bien. Luego nos enteramos que una compañera se sentía mal y sus cordadas, solidarias, la acompañan. En los penitentes me encuentro con otros dos compañeros que han decido volver también, uno de ellos está fatigado y considera mejor no seguir. Considero devolverme, me pregunto lo que siempre termino preguntándome en algún momento, qué hago aquí en lugar de echado en la carpa leyendo? Qué espíritu masoquista nos manda a subir estas montañas? Me paro por dos minutos, respiro, miro todo lo que he avanzado y continuo.

Tras 5 horas desde la partida del CB alcanzamos el sol en el portezuelo. Ahora voy con el equipo de cierre de la marcha, quienes nos van animando y organizando las paradas. Descansamos un rato al sol y seguimos el último tramo hacia la cumbre. Según la descripción de la ruta, quedaba un poco más de una hora para llegar.

Llegamos a una falsa cumbre. Aunque siento que me quedan energías, la altura me juega en contra. Veo que mi cordada estaba esperándome para el último tramo hacia la cumbre. Incluso dejo mi mochila para intentar subir más liviano, pero cada paso me agota. Finalmente decido no subir y sigo con la mirada al último grupo, alejándose hacia la cumbre. Mi cordada, a quien le agradezco muchísimo, se queda conmigo. Le sacamos fotos al Aconcagua, que nunca había visto tan directamente.

Así es como se veía la cumbre sur (4274 mtsm) con todos los que llegaron arriba. Grande Ramuch! De los 26 que salimos del CB, 18 consiguieron la cumbre sur del Tres hermanos. A las 11:00 estaban bajando todo el grupo.

Vuelta al CB

La vuelta fue tranquila, aunque con la nieve bastante más blanda. Luego del portezuelo, decidimos evitar el campo de penitentes, hacer un recorrido un poco más largo pero con menos pendiente. La laguna aparecía repetidamente y no dejaba de impresionarme todo lo que habíamos caminado.

En el CB nos espera una sesión de elongación dirigida por Paula. Mientras nos estiramos, conversamos sobre la jornada, la cual a pesar de que no todos hicieron cumbre, resultó sin nadie accidentado.

La tarde es para conversar. Si bien conozco a muy pocos, la rama mantiene un espíritu de liviandad y buena onda que me hace sentir bien. El punto de reunión es a unos metros de nuestros vecinos, donde somos bienvenidos a estirar nuestras colchonetas para tomar sol. Al poco rato me doy cuenta que ahí sentados cumplimos una función: llevar un registro exhaustivo de quién se encuentra ocupando el baño e indicar direcciones de dónde conviene ir según el nivel de privacidad requerido.

Cuando el sol nos deja comienza a correr viento y una bolsa huye perseguida por Gabriela. Finalmente la atrapa y vuelve orgullosa al campamento.

Antes de volver a dormir, derretimos más nieve para el último día. Dos litros para cada uno será más que suficiente. Carlos, intenta recuperar calor luego de haberse enterrado en un arroyo de agua gélida mientras exploraba la zona. Si bien consiguió salir rápidamente, los zapatos y parte de los pantalones quedaron empapados.

Lunes 19 de septiembre

Regreso a Santiago

8:15 am del lunes 17. Campamento desarmado y cordadas casi listas. Nos vamos de vuelta, la mayoría con crampones puestos dado que la nieve aún está dura y queremos evitar caídas. Hora planificada de llegada al centro de ski, 12:30 pm.

El regreso a Santiago es tranquilo. Orly nos muestra sus habilidades de artesano de nieve, retratando a su cordada. Inmediatamente, se le unen más artistas que prefieren guardar anonimato.

Esta vez, hacemos menos paradas donde se reúne todo el grupo. Principalmente, luego del primer macizo, me junto con el primer grupo, quienes llevan descansando un buen rato y se preparan para seguir.

En el segundo y último paso también se instala un pasamano, que facilita la confianza de todos.

Finalmente, llegamos todos y la mayoría terminamos en esta agua que nos estuvo tentando cada día. Creo que Daniel fue el único que aguantó más de 10 segundos. El agua helada fue en todo caso muy saludable, quizás gracias eso no me dolían tanto las piernas durante el resto de la semana.

Fonda y evaluación

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Última parada, Fonda Oficial en Los Andes. Le llevó salsa, empanadas, juguitos naturales, chelita y refrescos varios. Nos sentamos en una mesa larga bajo un ondeante toldo gigante y luego de comer nos sentamos en unos pastos con una exquisita sombra a hacer la evaluación.

Temas a tener en cuenta fueron la importancia de la puntualidad en la hora de reunión en Santiago, que luego nos pasó la cuenta para poder haber llegado al CB planificado e incluso la posibilidad de atacar la cumbre central. Todos los atrasos se van sumando. También falta más entrenamiento, tanto de cerros y cancha para los que se vieron fatigados. En cuanto a organización, es clave que aquellos inscritos cumplan y no se bajen a última hora, ya que perjudica la coordinación del transporte. En lo positivo, se celebró que nadie se accidentó y que se consiguió la cumbre sur. Se agradeció públicamente la solidaridad de las cordadas, el apoyo de los compañeros con más experiencia, los grupos de apertura y cierre, la organización del transporte y la coordinación de la Berni quien por lo demás partiría a las tierras de Edmund Hillary.